lunes, 22 de diciembre de 2008

Felices fiestas... ¿qué fiestas?

Yo no digo nada, pero esto del laicismo roza ya lo absurdo. Me importa poco que la peña sea atea, agnóstica, o de alguna secta aborigen de Australia. Como si quieren adorar al sol: somos libres de hacer lo que nos de la gana, aunque sea poco razonable. Pero es que me da la impresión de que estamos perdiendo el norte poco a poco.

A continuación, buena muestra de ello: os pongo dos imágenes. En la primera estan los christmas(?) oficiales de la Universidad (el más grande) y de la Facultad, con típicas imágenes navideñas, como se puede ver.



Por cierto, la foto de la facultad es la Biblioteca navideña.


Y en la segunda podemos contemplar el maravilloso sentimiento navideño de amor y caridad que inunda las tarjetas enviadas por mis queridos jefes.



En fin, que allá ellos. Pero me parece que las cosas no se pueden llevar a estos extremos del absurdo. Queremos un país laico, un pais aconfesional, un país respetuoso con la libertad de los ciudadanos. Pero me parece que no queremos (yo, al menos, no) un país activamente ateo, empeñado en extender el ateísmo a todos los ámbitos de la sociedad y que, encima, obvia las raíces cristianas de España que las tiene, para bien y para mal.

No hay comentarios: