domingo, 8 de febrero de 2009

Perez Reverte y sus últimos artículos.


De ordinario, me parece que Arturo Pérez Reverte es un colega que expresa muy bien lo que piensan muchos españoles. Pero en sus últimos artículos de Patente de Corso, cuyo link dejo más abajo, son bastante pobres. No sé si es que no tenía de qué hablar o que le va el tema. Pero la palabra que los define, aprovechando que es Académico de la lengua, es ZAFIO (pincha en la palabra para ver lo que significa). Al menos estos dos artículos. Seguramente si lee esto, me pondrá a parir, como suele hacer cuando lee algo que le critica y no le gusta, jeje.


Como ahora no tengo acceso para poneros los links, podéis ver sus artículos en http://www.xlsemanal.com/


Adeu!!

P.S. Ejemplos de lo que indico:

Del último: DANIELA EN PICASSENT

(...)Con lo cual, doscientas presas aullando calientes como perras –valga el tropo– componen un paisaje digno, tolerable, comprensible y divertido, mientras que doscientos presos aullando calientes como perros –aquí nadie me discutirá el tropo– es sucio, envilecedor, machista y, como casi todo, fascista. No te fastidia.

(...)Si yo mismo tuviera que comerme diez años en Picassent, o en donde fuera, y por Navidad y Año Nuevo me dieran a elegir, agradecería mucho más una Daniela con o sin tanga –a ser posible, sin– que la filarmónica de Viena tocando en el patio o un portal de Belén animado con pastorcillas, pastorcillos y el niño Jesús, fun, fun, fun, metidito entre pajas. Como dice un viejo y querido amigo con el que ayer comentaba esto: «Ojalá en los siete años que me zampé a pulso hubiera tenido algo así para tocar la zambomba».

Del anterior: AMOR BAJO CERO

(...) La noche sigue como resulta fácil imaginar: apartamento de Paco, un par de canutos, mucha guitarra y una dura campaña entre sábanas arrugadas, toda la noche dale que te pego, hasta que, ya amaneciendo, ella le da un beso, se despide sonriente y se larga al aeropuerto. Fin del primer acto.

(...) en ésas aparece allí, con su guitarra y quemando las naves, un fulano bajito, moreno y simpático que la tuvo en Marbella toda una noche dale que te pego, despierta y gritando: «Oh-yes, oh-yes, oh-yes» mientras él, sudando la gota gorda, decía: «Que sí, mujer. Te oigo, te oigo». Y claro. Pasando mucho del novio, que mira pasmado desde el coche, Otti se tira encima del visitante y se lo come a besos y lametones. Y lo mete adentro. Y los dos tardan cuatro días y varias botellas de Suomuurain y Mesimarja, además de la media de vodka que quedaba, en salir de la cama, con los vecinos asomados a la ventana para averiguar de dónde proceden esos alaridos inhumanos.

A lo mejor es que yo soy demasiado retrógrado (meapilas, me llamaría más de uno), pero a mi estos textos me parecen zafios.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me permito discrepar contigo un poco, aunque no te negaré que no son muy fuertes sus dos últimos artículos...

Aparicio dijo...

Permitido, por su puesto. No puedo acceder ahora a los artículos, pero en cuanto pueda, te daré varios ejemplos para que me digas si es zafio o no.

Anónimo dijo...

Una cosa no significa la otra. Gonzalo a ti lo que te pasa es que te gusta mucho Pérez Reverte, pero si es verdad que es un poco zafio, se pueden decir cosas fuertes sin ser zafio...